La pastoral social, busca la transformación social, luego de la semana social.

Con un mensaje final de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia episcopal argentina se concluyó, tras cinco días de reuniones, la platea digital de la Semana Social 2020 que leyó la difícil circunstancia de la pandemia en clave de transformación social.



Cinco días reunidos virtualmente, con una nutrida y variada participación y bajo un lema oportunamente reflejo de la difícil realidad de la pandemia de COVID-19: “Nadie se salva solo”. Esa frase pronunciada por el Papa Francisco, en su mensaje Urbi et Orbi extraordinario, del 27 de marzo, que recordaba la fragilidad del ser humano y la imperiosa necesidad de “remar juntos”, activar la solidaridad y cuidarnos mutuamente, inspiró la platea digital de la Semana Social 2020 que leyó la difícil circunstancia de la pandemia en clave de transformación social.



El impacto de la pandemia


A la luz de la participación de expertos y representantes de todos los sectores sociales, el documento subraya el impacto de la pandemia a todo nivel en un país, que como tantos otros, no estaba preparado para afrontar una contingencia de esa magnitud, sobre todo para los sectores más vulnerables. Un escenario, que una vez superada la pandemia, revelará enormes dificultades en una sociedad que necesita “abrir nuevos caminos", que necesita "superar el odio” y ver en la necesidad una oportunidad.
El encuentro y el diálogo aparecen como imprescindibles

“Oportunidad – se lee en el mensaje – en la cual el encuentro y el diálogo aparecen como imprescindibles para arribar a un gran acuerdo social y político, acuerdo que englobe el sistema educativo, judicial, energético, la matriz productiva, poniendo eje tanto en los mercados internos como externos. Que permita establecer modos de crecer la economía pero protegiendo el cuidado de la persona humana y el equilibrio ambiental, en el marco de un desarrollo sustentable como lo inspira Laudato Si'”
Acceso a internet como “derecho humano”

La Pastoral Social recuerda también que se debe recuperar el federalismo, es decir, salir de los escenarios capitalinos para valorar la “diversidad productiva y las potencialidades” del resto del país. Además, vista la importancia de los medios digitales para superar el confinamiento y su empleo trascendental en el sector educativo, la Semana Social 2020 sugiere que se instituya el acceso a internet como “derecho humano” capaz de reducir brecha social.

Ante este escenario inédito a escala global, los obispos concluyen su mensaje con una invitación a trabajar por la esperanza, “teniendo siempre presente que si no hay esperanza para los pobres no la hay para nadie”.

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